limpieza de filtros de una campana
Cada día da más pereza ponernos a limpiar la campana extractora al mirarla todos los días. Nos repetimos “ya la haré”, “de mañana no pasa”… No es necesario limpiarla todas las semanas, pero los filtros, yo si lo recomendaría porque se evitaría algún incendio que otro.
Comenzaremos la limpieza por la parte exterior:
1º.- Preparamos en un recipiente, 2 partes de desengrasante y 2 partes de agua muy caliente, una bayeta de rejilla, varias de microfibra y un trapo blanco de algodón. Guantes, zapato cerrado para no resbalar, escalera y periódicos para no resbalar al apoyarnos en la encimera.
2º.- Con la bayeta de rejilla (que no raya) la introducimos en la mezcla, y, sin escurrir del todo, pasarla por todo el exterior de la campana homogéneamente sin dejar ni un rincón. A continuación aclarar con una bayeta de microfibra que esté bien mojada, luego con otra limpia más escurrida y si es preciso, secar con el trapo blanco.
Pasamos a quitar los filtros y limpiamos el interior de la campana.
3º.- Con la mezcla sobrante de limpiar el exterior, vamos limpiando el interior con la bayeta de rejilla y ayudándonos de un rascador (cuchilleta, estropajo) para hacer mejor los rinconcitos y gotas que pueda haber, a continuación, aclaramos de igual forma.
Hay que tener cuidado con los cortes que nos podamos hacer por los acabados de fabricación de la campana. De manera preventiva, podemos ponernos unos guantes de algodón debajo de los de goma (esto hará un poco de freno).
Para limpiar los filtros lo haremos de la siguiente manera:
4º.-Calentamos los filtros en la misma fregadera, o bien a remojo (si caben), o debajo del grifo con agua lo más caliente que se pueda. Impregnamos la bayeta (porque el líquido en el estropajo se escurre) directamente con el desengrasante y frotamos el filtro poniéndolo verticalmente para que penetre el líquido por dentro. Seguidamente aclaramos con abundante agua debajo del grifo y dejamos escurrir un rato, luego secamos y ya está.