Barrer o Aspirar

Cuántas veces nos preguntamos ¿qué es mejor antes de fregar una superficie, barrer o aspirar?. Esto no quiere decir que el cepillo de barrer no haya que usarlo. El cepillo tiene su función. Por ejemplo, los zócalos se limpian con el cepillo (antes de barrer o aspirar) para retirar el polvo. También, es necesario para amontonar y recoger residuos ocasionales (sobre todo de mayor tamaño), pues es mucho más rápido y eficaz a la hora de deshacernos al retirarlos en el acto. Os habréis dado cuenta que no es lo mismo barrer que aspirar, pero de todas formas, si pensamos un poco vemos los beneficios y desventajas de cada uno de ellos. La aspiradora o el aspirador, también tiene su buena y no tan buena función. Me explico, el poder del aspirado es mayor a la hora de absorber el polvo, pero es más engorroso porque pesa más que un cepillo. El ruido del motor es bastante molesto y no se puede usar cuando uno quiere, si no cuando se puede, por el tema de horarios y si hay alguien en casa, porque resulta molesto, el tener que vaciar y limpiar el filtro para su mantenimiento y alargar su vida.

Barrer es una acción y se realiza con un cepillo o escoba con movimientos desde atrás hacia delante para amontonar los residuos existentes en la superficie antes de recogerlos.

Cuando barremos con un cepillo:

Queda una película de polvo en la superficie. Las juntas de las baldosas se rellenan. Al fregar, tenemos que cambiar el agua más veces. Las juntas se ven feas al retener el polvo de una vez tras otra.

Aspirar es una acción realizada con una máquina aspiradora, compuesta por un motor, un filtro, boquillas, manguera, cable o batería. El aspirador a la vez que barre, absorbe directamente el polvo y los residuos continuamente sin amontonarse.

Cuando pasamos un aspirador:

El barrido con aspirador resulta más efectivo al no dejar polvo en el suelo. Las juntas se mantienen limpias. Da un toque de profesionalidad a la superficie.

Aspirador
Cepillo

Recogedor
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